DIAGNÓSTICO
¿Cómo puedes saber si padeces una tendinopatía glútea?
- Sientes un dolor muy localizado en el hueso de la cadera. Tu dolor podría extenderse por el lateral de la pierna.
- A veces te duele también por la noche cuando te tumbas sobre ese lado (incluso sobre el otro lado).
- Te duele o tienes dificultad al realizar actividades como caminar, correr, subir escaleras, ponerte o quitarte los pantalones, entrar y salir de la bañera…
- Eres mujer de más de 40 años o corredor o puede que ambas.
Si todavía no cuentas con un diagnóstico profesional pero cumples con estas condiciones tienes muchas papeletas de que tu dolor esté asociado a una tendinopatía glútea.
Pero vamos a confirmarlo con un test de carga para el tendón de los abductores de cadera: apoyándote sobre una silla o contra la pared, ponte a la pata coja del lado que te duele. Mantente firme en esa posición durante 30 segundos sin dejar caer la cadera. ¿Reproduce tus síntomas?
Si vas al fisio de forma presencial, puedes pedirle que te realice el test de desrotación externa de cadera contra resistencia. ¿Reproduce tus síntomas?
En caso de que estas pruebas sí reproduzcan tus síntomas, la probabilidad de que se trate de una tendinopatía glútea, según este estudio, es muy alta.
Las pruebas de imagen no son relevantes, por tanto, para el diagnóstico de este problema. Si aun así quieres someterte a una prueba de imagen para tener más elementos que confirmen tu diagnóstico, mejor una ecografía que la resonancia magnética, ya que ofrece menos falsos positivos.
Sería conveniente valorar también la cadera, la pelvis y la región lumbar. Existe una relación entre la tendinopatía glútea y el dolor lumbar. Se ha visto que la prevalencia de esta patología en personas con dolor lumbar es de hasta el 35% y que a mayor duración del dolor lumbar, mayor es la incidencia de dolor lateral de cadera. Además, el tratamiento de la tendinopatía glútea mejora la función de las personas con dolor lumbar, por lo que la tendinopatía glútea podría ser una causa de dolor lumbar.
Por último, te recomiendo que acudas a tu médico si cumples una o varias de estas condiciones:
Banderas amarillas
Tienes más de 60 años.
Te has caído o has tenido un golpe fuerte sobre la cadera.
Además del dolor de cadera, tienes también dolor en la ingle y mucha rigidez matutina.
Sientes fatiga crónica y pierdes peso de una manera muy rápida y sin explicación lógica.
Sientes hormigueo y entumecimiento en las piernas o dolor que se irradia por debajo de la rodilla.